THE GUARDIAN — MARTES, 6 DE ABRIL DE 2021
Primer ministro británico confirma relajación del confinamiento, pero pone paños fríos a esperanza de reanudación de viajes al extranjero el próximo mes
La vida empezará a ser nuevamente «algo parecido a la normalidad» en junio, ha prometido Boris Johnson al dar luz verde para que pubs, tiendas, peluquerías y gimnasios reabran en Inglaterra a partir del próximo lunes, pero no quiso arriesgarse a decir cuándo podrían reanudarse las vacaciones.
El primer ministro británico dijo que pasar a la siguiente etapa de la hoja de ruta del Gobierno para salir del bloqueo está «totalmente justificado» por el éxito del lanzamiento de la vacuna y la disminución de casos y hospitalizaciones, lo que permitirá que una gran cantidad de lugares operaran por primera vez en tres meses.
Sin embargo, sugirió que los ‘certificados de estado de Covid’ y las pruebas semanales masivas podrían ser clave para que se alivien más las restricciones — lo que aumenta la posibilidad de que tales intervenciones permanezcan vigentes durante los próximos meses.
Las esperanzas de que se permitan las vacaciones en el extranjero a partir del 17 de mayo disminuyeron cuando Johnson dijo que «no deseaba dejar nada al azar» y que estaba nervioso por «la reimportación del virus» desde el extranjero dado el aumento de casos en toda Europa.
Antes de la conferencia de prensa de Downing Street, científicos del Grupo Asesor Científico para Emergencias (Sage) del Gobierno dijeron que la reapertura de lugares la próxima semana — con servicio al aire libre solo en pubs y restaurantes — era «muy poco probable» que causara un colapso al NHS. Aún así, advirtieron que una mayor relajación en mayo y después podría desencadenar una tercera ola en Reino Unido tan mortal como la que se vio durante el invierno, en que ocurrieron más de la mitad del total de muertes por Covid en el país.
Un trabajo de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, basado en suposiciones pesimistas pero realistas sobre la efectividad de las vacunas, pronosticó que una tercera ola podría alcanzar su punto máximo a fines de julio o principios de agosto, con hospitalizaciones en la misma escala que en enero. La mayoría de los otros escenarios modelados mostraron un pico de tercera ola potencial más pequeño.
En su comparecencia — que se produjo junto al profesor Chris Whitty y Sir Patrick Vallance — Johnson confirmó que los establecimientos de hostelería podrán operar al aire libre, dentro de lo previsto, solo a partir del lunes 12 de abril, sin toque de queda ni requisitos para que los clientes consuman una «comida sustancial» cuando beban alcohol.
«Yo mismo iré al pub y con cautela, pero de todas maneras, me tomaré una pinta de cerveza,» declaró.
Johnson dijo que los certificados de estado de Covid — para que las personas demuestren que han recibido una vacuna, una reacción en cadena de la polimerasa Covid (PCR) negativa reciente o una prueba rápida, o anticuerpos de una infección por coronavirus en los últimos seis meses — permanecen bajo revisión para su uso dentro de Reino Unido, y no entraría en uso antes de mayo o junio.
No dio ninguna garantía concreta de que el plan fuera a votarse en el Parlamento luego que decenas de parlamentarios conservadores y laboristas prometieran oponerse, pero dijo: “Si hay algo que presentar en el Parlamento, estoy seguro de que lo haremos.»
Johnson fue más partidario de que tales documentos se utilicen para viajes internacionales, diciendo que era «algo que todos los países están estudiando», y agregó que pensaba que iba a ser «parte de la forma en que las personas lidien» con la amenaza continua que representa la Covid-19 y sus nuevas variantes.
Después de las críticas del Partido Laborista de que la política de cuarentena hotelera del Gobierno para las personas que llegan a Reino Unido no era lo suficientemente estricta, Whitty dijo que los casos de la variante de Sudáfrica, que se cree que es más transmisible, eran estables y confirmó que “no había evidencia que esto vaya en aumento”.
Aún así, el director médico de Inglaterra agregó que las medidas para prevenir otra ola de la pandemia en Reino Unido durarían algún tiempo, advirtiendo: “Tendremos problemas importantes con la Covid en el futuro previsible, y no creo que debamos pretender que no será así.»
Junto a la conferencia de prensa, Downing Street publicó un informe sobre cuatro revisiones en curso que analizan el distanciamiento social, el reinicio de eventos masivos, las vacaciones en el extranjero y los certificados de estado de Covid — también conocidos como ‘pasaportes de Covid’.
El informe dijo que prohibir los certificados sería una «intrusión injustificada en cómo las empresas eligen proporcionar seguridad a sus instalaciones» en la mayoría de los casos, y dejó abierta la posibilidad de que se utilicen en pubs y bares, así como en teatros, clubes nocturnos y eventos masivos como partidos de fútbol y festivales.
Afirmó que no serían necesarios en tiendas esenciales, edificios de servicios públicos o en transporte público, y reveló que el NHS estaba estudiando cómo ofrecer versiones digitales y no digitales.
En una actualización sobre el reinicio de los viajes internacionales, el documento dice que el Gobierno «espera que los ciudadanos puedan viajar hacia y desde Reino Unido para tomar unas vacaciones de verano este año».
La hoja de ruta de Johnson para salir del confinamiento, publicada el 22 de febrero, decía que a partir del 17 de mayo se permitirían nuevamente los viajes internacionales pero «sujeto a revisión». A pesar de ello, si bien en la última revisión se confirmó un sistema ‘semáforo’ para viajes al extranjero, no se otorgó ningún respaldo a esa fecha y no se nombró a ningún país. “Aún no estamos en condiciones de confirmar que los viajes internacionales no esenciales puedan reanudarse desde ese momento,» dice el documento.
La industria de viajes ha manifestado su frustración. El director ejecutivo del aeropuerto de Heathrow, John Holland-Kaye, dijo que era «decepcionante que se haya perdido la oportunidad» y que se necesitaba «un cronograma más claro» para el retorno a los viajes internacionales.
Johnson dijo que su hoja de ruta de febrero «sigue siendo a lo que nos adherimos como con pegamento», pero su falta de voluntad para moverse más rápido y la amenaza de los certificados de estado de Covid provocaron la ira del parlamentario conservador Mark Harper, quien preside el Covid Recovery Group — conformado por parlamentarios que presionan para un desconfinamiento más rápido.
Harper dijo que era decepcionante que el plan del primer ministro estuviera «impulsado por fechas y no por datos» cuando «los datos sugieren que podría ir más rápido y de forma segura en lugar de estar actuando rígidamente». También advirtió que no sería aceptable que el Gobierno introduzca certificados de estado de Covid «por la puerta trasera» y dijo que era crucial que los parlamentarios pudieran votar sobre un sistema que crearía «una Gran Bretaña de dos clases».
Otros cambios que entrarán en vigor el próximo lunes son la apertura de salones de belleza, manicura y spa, pero no saunas ni baños termales. Se permitirán pernoctaciones fuera de casa en Inglaterra y los alojamientos independientes pueden reabrirse, pero solo para uso de miembros del mismo hogar o burbuja de apoyo.
Se permitirá que las bibliotecas y los centros comunitarios vuelvan a abrir, junto a zoológicos, parques temáticos y autocines.
El número de personas nominadas que pueden visitar un hogar de ancianos aumentará a 2 por cada residente, y todos los niños podrán asistir a cualquier actividad infantil bajo techo incluyendo deportes, bajo cualquier circunstancia.
Para aquellos que planean bodas, las recepciones al aire libre podrán tener lugar con hasta 15 asistentes. Se alentará a las personas a trabajar desde casa siempre que sea posible y a minimizar los viajes nacionales.
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