Ni trenes, ni luz

HOY — LUNES, 30 DE MAYO DE 2022

InsinĆŗan que huelga ferroviaria podrĆ­a durar semanas

El lƭder del sindicato RMT ha sugerido que una huelga ferroviaria podrƭa durar semanas y afectar la red elƩctrica britƔnica.

Mick Lynch, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores Ferroviarios, Marítimos y del Transporte, dijo que su acción industrial podría durar semanas, lo que provocaría una gran perturbación en todo el Reino Unido y una huelga masiva del personal de los servicios ferroviarios, debido a la disputa en curso en torno a la congelación de los salarios y las condiciones de trabajo.

Lynch advirtió que sus afiliados estÔn preparados para hacer huelga cuanto sea necesario, hasta que las patronales satisfagan las demandas de los trabajadores. Hablando con Sophy Ridge en Sky News, reveló que las huelgas podrían afectar el suministro de energía de la nación, ya que las reservas de energía podrían no bastar para hacer frente a las largas ausencias de los trabajadores.

ā€œSi hay huelga, entonces corresponde al Gobierno dar un mandato a las empresas de que resuelvan este conflicto,ā€ dijo Lynch. ā€œY estas acciones industriales podrĆ­an continuar durante mucho, mucho tiempo; de momento no parece que nadie se vaya a echar atrĆ”s.ā€

21°C para el Jubileo

Met Office predice fin de semana largo seco y soleado en Londres y el sureste para las miles de celebraciones al aire libre por Jubileo de la Reina

Portadas del dĆ­a

The Times – Advierten a millones de cortes de luz
Daily Telegraph – Los mejores universitarios del mundo, bienvenidos
The Guardian – Reporte de Home Office revela 30 aƱos de leyes racistas
The Independent – Resultado de ‘partygate’ aumenta presión sobre Johnson
Metro – Rojos de furia por farsa francesa
Daily Mail – 12 millones compartirĆ”n comida con la Reina
i news – PM quiere anular leyes de UE para calmar a MPs rebeldes
Daily Mirror – PolicĆ­a gaseó a mi hijo de 9 aƱos
Daily Express – MultarĆ”n a pacientes que no asistan a visita con el GP
The Sun – Meg y Harry regresan

Roland Gift, el primer ‘punk’ negro

Photo by Alan Light / flickr (CC BY 2.0)

Exvocalista de la banda inglesa Fine Young Cannibals y estrella mundial en los aƱos 80, dice que el problema social de Reino Unido ‘no es de raza, sino de clase’

No hay carteles de películas en la casa de Roland Gift en Holloway (Londres), y los discos de platino estÔn empaquetados y guardados. Es un hogar que da pocas pistas sobre la notable historia de vida que este hombre de 59 años estÔ a punto de contar: cómo el primer punk negro de Hull se convirtió en estrella internacional del pop y el cine.

ā€œSiempre he tenido miedo de meterme en eso de la fama y el mundo del glamour,ā€ dice hoy. Incluso cuando su banda — los Fine Young Cannibals, famosos en todo el mundo — encabezaba las listas de Ć©xitos a ambos lados del AtlĆ”ntico con su segundo Ć”lbum de 1989, The Raw & The Cooked, ya tenĆ­a una relación incómoda con el estrellato.

En la cima de la popularidad, luego de interpretar a Lucky Gordon en Scandal — la pelĆ­cula sobre el caso Profumo — y ser nombrado una de las Ā«50 personas mĆ”s bellasĀ» del mundo, se mudó de un momento a otro a su ciudad natal de Hull, pasando el rato en el club del barrio y trabajando como conductor de tractores. ā€œMe gustaba estar en algĆŗn lugar donde no destacara por ser guapo. Nunca quise enamorarme de la imagen que veĆ­a en el espejo,ā€ dice, encogiĆ©ndose de hombros. En 1990, despuĆ©s de que la primera ministra Margaret Thatcher llegara a la ceremonia de entrega de los premios BRIT Awards, los Cannibals devolvieron sus estatuillas y dijeron que Ā«no querĆ­an ser parte de un evento del Partido ConservadorĀ». AsĆ­, a pesar del Ć©xito global de The Raw & The Cooked, la banda nunca hizo otro Ć”lbum.

Sin embargo, Gift nunca esperó ser famoso: cuando crecĆ­a como un niƱo mestizo en la dĆ©cada de los 70, habĆ­a pocos rostros negros en los anuncios o en la televisión. ā€œHabĆ­a actores negros en pelĆ­culas como Scum [Inmundicia] o Scrubbers [Limpiadores],ā€ recuerda, ā€œpero eso es lo gracioso… solo hacĆ­an personajes de prisionerosā€. Hijo de un carpintero negro y una madre blanca encargada de tiendas de ropa de segunda mano, Roland pasó sus primeros aƱos en Sparkhill (Birmingham), una de las primeras zonas multiculturales de Reino Unido. ā€œNo habĆ­a carteles en nuestro vecindario que dijeran ā€˜prohibido irlandeses, perros y negros’. Porque todos Ć©ramos negros, marrones o irlandeses. Para mĆ­ eso era lo normal.ā€

Mudarse a Hull a los 11 aƱos fue Ā«un shock: solo habĆ­a otros dos niƱos que no eran blancos en esa escuelaĀ», pero Gift nunca se sintió tratado inapropiadamente. Terminó en la escena punk de aquella ciudad industrial de Yorkshire, donde por su chaqueta de cuero negra, piel oscura y pelo rubio le empezaron a llamar Guinness, como la cerveza irlandesa. En un concierto de The Clash en Leeds, logró llamar la atención del cantante Joe Strummer. ā€œDurante el concierto se le rompieron los pantalones,ā€ se rĆ­e Gift, contando que Strummer empezó a preguntar si alguien llevaba un imperdible — y luego una lluvia torrencial de aquellos artĆ­culos-insignia de la moda punk cayó sobre el escenario.

ā€œNormalmente nunca llevaba, pero por alguna razón tenĆ­a un imperdible en mi chaqueta. Le gritĆ©: Ā”Joe! Ā”Joe!’ Y se agachó y lo cogió. Me sentĆ­ como en la imagen del techo de la Capilla Sixtina, donde Dios se inclina.ā€ ĀæComo si hubieras sido El Ungido? ā€œYo no sĆ© nada de eso,ā€ se rĆ­e, ā€œpero sĆ­ fue un gran momentoā€.

En ese momento fue que encontró su vocación. Estaba en la banda de ska punk Akrylykz cuando Andy Cox y David Steele — escocidos luego de la fractura de una de las primeras bandas multirraciales de Reino Unido, The [English] Beat — le reclutaron para Fine Young Cannibals, con el objetivo de mezclar rock y soul con la inimitable voz temblorosa de Gift, reflejado en Ć©xitos como Good Thing, nĆŗmero 1 en Estados Unidos, y I’m Not The Man I Used To Be. Su Ć©xito se produjo a pesar de que alguna figura importante de la industria les dijo que una banda blanca con un cantante de piel morena nunca llegarĆ­a muy lejos.

She Drives Me Crazy — Ć©xito al otro lado del AtlĆ”ntico tambiĆ©n — era emitida tanto en radios universitarias como en estaciones urbanas (negras) norteamericanas, lo que suponĆ­a una rareza en ese entonces. ā€œSe decĆ­an tantas tonterĆ­as sobre la raza y la mĆŗsica,ā€ suspira, ā€œcomo que ā€˜los negros tienen mejor ritmo’, cuando [la discogrĆ”fica] Stax tenĆ­a mĆŗsicos blancos y Leslie Kong, que era chino, produjo mucho reggae jamaiquinoā€.

A finales de los aƱos 80 y 90, el mundo del cine britĆ”nico tambiĆ©n se abrió mĆ”s a la diversidad. El primer papel de Gift fue el del apuesto y joven revolucionario Danny en Sammy and Rosie Get Laid, la continuación de 1987 del Ć©xito que Stephen Frears y Hanif Kureishi habĆ­an logrado con la pelĆ­cula My Beautiful Laundrette. A pesar de ello, Gift no llegaba al casting como favorito para el papel. ā€œAlguien me dijo mĆ”s tarde que pidieron a las mujeres de la oficina que pasaran y me echaran un vistazo,ā€ explica, soltando una risilla. Ā«AsĆ­ conseguĆ­ el trabajo.Ā»

Posteriormente, los proyectos han ido desde la serie de televisión Painted Lady de 1997 con Helen Mirren hasta la pelĆ­cula Brakes de 2017 con Noel Fielding. Aparte de algĆŗn papel Ā«estereotĆ­picoĀ» que le han ofrecido, no cree haber experimentado barreras raciales. ā€œNo en pantalla. Pero sĆ­ podrĆ­a suponer una barrera si uno quiere crear el contenido.ā€ Y podrĆ­a estar de acuerdo con el comentario de [el director de cine] Steve McQueen: Ā«Si quieres entender el racismo y el clasismo en Gran BretaƱa, empieza por ir a un estudio de filmación.Ā»

ā€œMe di cuenta de que eso pasaba en las discogrĆ”ficas. De repente, lo vi: ā€˜Todos Ć©stos han salido de colegios privados. Ellos eran los titiriteros. E invariablemente eran de cierto color.ā€

ā€œPodrĆ­amos obsesionarnos con eso de la identidad,ā€ considera. ā€œYo soy mitad blanco y mitad negro. ĀæY quĆ© pasa? Todos hacemos lo mismo.ā€ Cuenta un incidente de su niƱez cuando Ć©l y algunos amiguitos irlandeses, los chicos de apellido Magee, se metieron en un barrio elegante y se encontraron con dos niƱos vestidos con zapatos que brillaban de tan limpios. ā€œNos miramos unos a otros a travĆ©s de la verja y ellos tambiĆ©n eran mestizos, pero me di cuenta de que yo tenĆ­a mĆ”s en comĆŗn con los Magee, que eran blancos, que con esos otros niƱos. Su padre se los llevó lejos de nosotros. AsĆ­ que no es racismo, es clasismo. Siempre es clasismo.ā€

Una división de otro tipo fue lo que acabó con los Cannibals en 1996. ā€œTodos se hincharon de ego despuĆ©s del Ć©xito. Hubo disputas acerca de que yo salĆ­a en pelĆ­culas, y luego la gente me decĆ­a cosas sobre Andy y David, y a cada uno de ellos sobre mĆ­ y el otro. Divide y vencerĆ”s, bĆ”sicamenteā€. Cuando una nueva pelĆ­cula buscaba mĆŗsica, Gift se presentaba para componer la banda sonora. ā€œY tambiĆ©n Dave y Andy, pero no nos lo habĆ­amos contado. Siempre habĆ­amos prometido no ser de esas bandas que ‘llegan por separado’, pero un dĆ­a terminamos siĆ©ndoloĀ». Se ve que lo lamenta un poco. ā€œOjalĆ” hubiĆ©ramos hecho un poco mĆ”s de cosas juntos.ā€

En 2013, la invitación a una gira con Jools Holland reavivó su interĆ©s por cantar en directo, y en algunos shows tuvo una sensación casi trascendental. ā€œNinguna experiencia extrasensorial, sino mĆ”s bien: ā€˜Mierda… mejor no perdamos el contacto con la realidad’. Suena un poco raro, Āæno?ā€

Gift canta canciones antiguas y nuevas en su Ćŗltimo proyecto, Return to Vegas, un musical de teatro producido por BBC Radio 4. Interpreta a Johnny Holloway, mĆŗsico de una banda a la que llama The Blacks, que consigue una serie de Ć©xitos mundiales antes de que las cosas se tuerzan: Holloway adquiere Ā«malos hĆ”bitosĀ», vende los derechos de las canciones que se suponĆ­a serĆ­an su pensión y termina arruinado, sin amigos y reciĆ©n en la calle luego de cinco aƱos en prisión. ā€œEs lo que podrĆ­a haber sido mi historia, si las cosas hubieran sido diferentes,ā€ dice.

Antes de este arreón creativo, Gift habĆ­a ralentizado su carrera a propósito porque querĆ­a ser un padre presente para sus hijos. El suyo pasó tres aƱos en prisión, ā€œasĆ­ que no querĆ­a estar aquĆ­, allĆ” y en todas partesā€. Pero los dos hijos de Gift ya han crecido y su esposa, Louise, falleció de cĆ”ncer el aƱo pasado. EstĆ” ansioso por sumergirse de nuevo en el trabajo; le han pedido escribir mĆ”s para la radio, y le brillan los ojos cuando dice: Ā«Escribir la obra me supuso, de alguna manera, una especie de cambio de vida.Ā» Lo que Gift realmente no quiere es ser descrito como Johnny Holloway — su alter ego en Return to Vegas — cuando alguien le grita: ā€œYa no eres el hombre que solĆ­as ser [guiƱo a su canción I’m Not The Man I Used To Be].ā€

ā€œHay un sueƱo recurrente en el que Johnny estĆ” firmando en un mostrador y alguien se acerca y le dice ā€˜Ah, tĆŗ eres el que tocaba con los … Ā”a ver, cĆ”ntate algo!ā€™ā€, y hace una mueca. ā€œEso serĆ­a una pesadilla para mĆ­ pero es la historia de Johnny, no la mĆ­a. Yo, todavĆ­a siento que tengo mucho que ofrecer.ā€

————————