
THE GUARDIAN – JUEVES, 10 DE MAYO 2018
El gabinete ha suspendido los controvertidos
acuerdos
por los que el NHS compartía datos de sus pacientes con el Home Office, para poder rastrear a quienes violan las normas de inmigración.
El cambio de opinión del gobierno sobre un elemento clave de su enfoque de “ambiente hostil” a la inmigración se produjo después de que parlamentarios, grupos de médicos y organizaciones benéficas de salud advirtieron que la práctica estaba desanimando a algunos pacientes de buscar atención del NHS para sus problemas médicos.
Margot James, ministra de Medios Digitales, Cultura, Medios de Comunicación y Deportes, anunció el replanteamiento durante un debate parlamentario sobre el proyecto de ley de protección de datos. Confirmó que el gobierno había decidido suspender “con efecto inmediato” el memorando de entendimiento (MOU) por el que NHS Digital, el brazo estadístico del servicio de salud, compartió 3.000 datos de pacientes del NHS con el Home Office el año pasado para verificar su estatus migratorio. Los pacientes habían dado sus detalles cuando asistían a citas con médicos generales en el hospital.
En el futuro, el personal de inmigración solo podría utilizar el mecanismo de intercambio de datos para rastrear a personas que están siendo consideradas para la deportación de Reino Unido por delito grave, dejó en claro James ante los parlamentarios.
James allanó el camino para el giro en redondo aceptando una enmienda, presentada por la parlamentaria conservadora Sarah Wollaston y el diputado laborista Paul Williams, que pidió la suspensión del MOU.
Williams, que además es médico de cabecera, recibió con agrado “este gran giro en redondo”, y agregó: “La información del NHS solo debe compartirse en caso de condena o investigación por delito grave, no para crear un ambiente hostil donde la gente tenga miedo de acudir a su médico de cabecera por temor a que la información se trasmita al Departamento de Trabajo y Pensiones para después sufrir sanciones en sus ‘benefits’.”
———-
Network Rail buscará eliminar todos los árboles que sufran de “caída de hojas” en un nuevo programa de “autorización mejorada” que invertirá £800 millones en cinco años, según un documento interno confidencial.
El documento donde consta la política de 2019 a 2024 surgió cuando el ministro de medio ambiente Michael Gove convocó al director ejecutivo de Network Rail, para hablar sobre su enfoque de gestión ambiental luego de revelaciones sobre la tala de árboles en todo el país.
Después de las conversaciones con Network Rail Jo Johnson, ministro de ferrocarriles, estableció una revisión del manejo del exceso de vegetación. Pidió que se suspenda toda la tala de árboles durante la temporada de anidación actual, de marzo a agosto.
Johnson dijo: “Esta revisión considerará todos los aspectos del problema incluyendo, por ejemplo, si Network Rail tiene la posibilidad y capacidad de controlar la vegetación de una manera que se minimice el daño a la vida silvestre, si el personal necesita más capacitación para ayudar con la
identificación de árboles, y si puede identificar enfoques que sean mejores que la tala.”
El documento filtrado establece un nuevo programa que parece ir más allá de cualquier gestión ambiental actual. Implica un “nivel mejorado de remoción” de árboles y vegetación de los aledaños ferroviarios a lo largo de 20,000 millas de líneas en Reino Unido, en un intento de lidiar con las costosas demoras en los servicios.
El documento dice que Network Rail tiene que gestionar el riesgo de que 13 millones de árboles se encuentren a una distancia corta de sus vías. Si se elimina el 2% de los árboles al año durante el período de cinco años, podrían talarse más de un millón de árboles.
———-
Fuego y furia en Teherán: solo un día después de que el presidente Trump anunciara que Estados Unidos se retiraría del acuerdo con Irán, el parlamento iraní quemó una bandera estadounidense de papel mientras coreaba “muerte a Estados Unidos”.
